Ezequiel lo tenía todo: fortuna, poder, respeto… y un don secreto que lo hacía sentirse invencible: podía abandonar su cuerpo y viajar con el alma.
Pero la traición no perdona. Una noche, mientras creía ser dueño del mundo, descubrió que su esposa y su socio habían urdido un plan siniestro para arrebatarle todo, incluso a su hija Camila.
Muerto y atrapado entre dos mundos, Ezequiel deberá enfrentarse no solo al dolor de la traición, sino también a las fuerzas oscuras que se alimentan de su desesperación.
Cuando Aurelio –un guía espiritual marcado por su propio pasado de traiciones–, aparece en su camino, comienza para él un aprendizaje filosófico y brutal, y deberá vencerse a sí mismo para poder vencer a los demás.
Entre lágrimas, combates y revelaciones, Ezequiel descubre que la verdadera batalla no es por su fortuna perdida, sino por el alma de su hija.
Porque la justicia, aunque tarde, siempre llega… Y a veces llega desde el más allá.